Luis Emigdio Vega, nadador cubano de estilo mariposa. Foto: Tomada de Internet. |
La natación cubana encuentra en los capitalinos Andrea Becali y Luis Vega a sus exponentes más consagrados y talentosos, unidos a la más experimentada de todos, la ondina guantanamera, Elisbet Gámez.
Tanto Becali como Vega serán decisorios en el resultado que aspira tener Cuba en los juegos centroamericanos de 2023, aplazados para ese año por la COVID-19, y también serán las principales figuras con las que se trabajará de cara al próximo ciclo olímpico.
Así lo aseguró a la COCO otra capitalina, Luisa María Mojarrieta, cariñosamente conocida como Lulú y actualmente entrenadora del equipo nacional de natación.
Mijarrieta expresó que Becali es una atleta muy joven, estuvo hasta última hora entrenando en el complejo de piscinas Baraguá, con la esperanza de que le fuera otorgada una plaza para la cita olímpica de Japón.
Por otra parte, destacó las potencialidades de Vega, del que refirió que es muy disciplinado, y que ha sido muy oportuna su beca en el exterior porque se ha perfeccionado.
“Tengo mucha fe en que Luis hará reverdecer laureles en la natación cubana, apenas tiene 22 años y su clasificación a Tokio es sólo el comienzo para él, significó Lulú.
Por último, enfatizó que Andrea se encuentra en su casa, y entrena en el litoral habanero, en busca de mantener su forma física. Precisó que debe incorporarse al equipo el próximo 15 de agosto, pues hay que preparase para el mundial de diciembre.
“Mientras, Luis retornará a La Habana, una vez concluya su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio, a la espera de que se mantenga o no su beca, otorgada por la Federación Internacional de Natación, FINA”, puntualizó la fuente.