La locución, el arte de moldear mejores seres humanos

Felicitamos este primero de diciembre a todos los locutores cubanos en su día. Foto: Tomada de Internet.
Por: Lenay Barceló Soto 

Desde pequeña lo tuve claro: seré locutora algún día. Ese día llegó hace algún tiempo, luego de un arduo camino de estudio, autopreparación, entrega a la obra de comunicar y, sobre todo, tras haber escuchado y visto a grandes profesionales, desempeñarse en una de las labores más lindas que conozco.

Recuerdo con emoción los primeros momentos frente al micrófono. Parece fácil, pero es un ambiente que impresiona, no tanto por el entorno en sí, pues eres solo tú y un micrófono. ¿Cuánto puede intimidar esto? Pues mis colegas lo pueden decir mejor que yo. 

No es el micrófono, o tener allá, detrás del cristal, a un especialista del sonido o a un director de programas, es saber, que ahí, trás ese micrófono, un receptor de la señal hace llegar tu voz a esa persona que te escucha. Mejor dicho: hay cientos, miles, y hasta millones de seres que ponen un minuto de sus vidas en función de atender lo que tienes que decir. Eso es lo que hace temblar las piernas, las manos y hasta los corazones.

Cada paso, esfuerzo, libro que leí, obra que estudié, asunto que me llamó la atención, fue llenando granito a granito ese espacio de conocimiento imprescindible para llegar a ser una profesional de los medios de comunicación. 

Profesores, tuve los mejores, y si soy sincera, la mejor escuela es la de entregar la voz cada día con la premisa de no defraudar a esos que te enseñaron el arte de transmitir con la voz, ideas, pero también emociones. 

A esta máxima, se suma para el locutor, otra prioridad: la de hacer que quien te escucha no solo asimile lo que dices, sino que logres mover fibras de sensibilidad que conviertan a ese receptor, en un mejor ser humano.

!Feliz día del locutor a todos los colegas de la Radio COCO y de todo el sistema de la Radio y la Televisión en Cuba!

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