Foto tomada de Cubadebate. |
Por: Liliam López Cruz
La actual Constitución de la República de Cuba, proclamada el 10 de abril de 2019, estableció nuevas pautas para los municipios sobre el principio de autonomÃa, con el fin de impulsar el desarrollo del territorio.
Esta instancia gubernamental es la más cercana al ciudadano como receptor inmediato de los problemas económicos y sociales de las comunidades.
Sin embargo, en algunas localidades de La Habana no se ejerce como tal el principio de ser el motor impulsor que brinde soluciones o respuestas ante las problemáticas que en estos momentos afectan el bienestar de los pobladores.
Estas insatisfacciones se evidencian en la creciente situación del saneamiento e higiene comunal, el vertimiento de aguas potables y albañales, el poco seguimiento y control de obras que demandan el progreso de la demarcación, asà como el alza de los precios en los productos más demandados por la sociedad, por solo mencionar algunos ejemplos.
Para que el Poder Popular, compuesto en la Asamblea Municipal, cumpla su rol como órgano competente es importante que los representantes a nivel de base, dÃganse delegados de circunscripción y presidentes de consejos populares, deben realizar su función de preocuparse y ocuparse por atender las situaciones más acuciantes del lugar donde residen.
La labor del municipio ante la compleja situación que enfrentan hoy los cubanos debe tener como eje principal el de viabilizar las necesidades locales, para alcanzar el bienestar de sus habitantes y el perfeccionamiento territorial, dando buen uso de los recursos que el paÃs pone a su disposición.
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— Canal Caribe (@CanalCaribeCuba) October 16, 2023
Presidente cubano destaca importancia de la gestión territorial, de la necesidad de una mayor coordinación entre las Asambleas Municipales del Poder Popular y los Consejos de Administración que permita articular polÃticas nacionales y locales. pic.twitter.com/qQw0Syeg9y
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