Foto tomada de Cubadebate.
Por: Redacción Digital
La Habana, como una de las 15 provincias de Cuba, cuenta con historias, anécdotas, hechos y procesos que no se detienen, para demostrar su vitalidad.
En fecha como esta, pero en diversos años, en la Ciudad Maravilla tuvieron lugar distintos acontecimientos que marcan su devenir y que resultan de gran interés para los usuarios que visitan nuestro blog institucional.
Por ejemplo, en 1901, la Havana Railway Company inauguró oficialmente el servicio de tranvías eléctricos de la capital, con líneas férreas que sobrepasaron su término municipal.
Según reseña la enciclopedia EcuRed, la planta eléctrica que garantizaba el servicio estaba situada en Águila y Colón, en lo que hoy es el territorio de Centro Habana, y generaba la totalidad de la energía de corriente continua requerida. Esta planta fue desmantelada en 1913.
Por entonces, agregó la propia fuente, la ciudad contaba con más de 240 mil habitantes y las viejas líneas de los tranvías de tracción animal no sólo resultaban insuficientes, sino que se hallaban extraordinariamente deterioradas.
Poco a poco, las nuevas líneas se extendieron por toda la urbe, cuya fisonomía quedó marcada ostensiblemente por las construcciones vinculadas con el tranvía eléctrico. Los accidentes, que se sucedían con frecuencia, dieron motivo para que los carros eléctricos fueran bautizados por la población con el nombre de "funerarias eléctricas" y por sus dos antenas o troles se les denominó "la langosta".
Luego, en 1957, la joven revolucionaria Urselia Díaz Báez muere cuando le explota el artefacto que tenía la misión de colocar en el baño de mujeres del cine América, como parte de sabotajes simultáneos que se planearon para La Habana ese día.
Díaz Baez constituyó la primera mujer mártir en la lucha clandestina, por lo que sumó su nombre a la larga y heroica lista de cubanos y cubanas caídos en aras de un ideal revolucionario. Con su muerte, ella nos legó el ejemplo de abnegación y patriotismo de lo mejor de la juventud antillana.
Además, en 1979, es inaugurado el Teatro Nacional de Cuba con una función de gala ofrecida por el Ministerio de Cultura, en homenaje a los delegados a la Sexta Cumbre de los Países No Alineados.
Ese mismo año, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz inaugura en La Habana la mencionada Cumbre, con un discurso en el que acusa al imperialismo norteamericano como principal causante de los males que aquejan al Tercer Mundo.
A pesar de que Estados Unidos trató de sabotear la conferencia desde que Cuba fue elegida como sede, la reunión de jefes de Estado y Gobierno del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) fue un éxito y quedaron reafirmados el prestigio de la Revolución y su firme posición de apoyo incondicional a los pueblos tercermundistas.
Foto: Alex Castro/Cubadebate.
Por otra parte, en vísperas del aniversario 65 de su ingreso en la Universidad de La Habana, en el 2010, Fidel se reúne con los estudiantes junto el Alma Mater de la casa de altos estudios.
De verde olivo, ante una multitud que colmó la histórica escalinata y sus alrededores, leyó su mensaje a los jóvenes universitarios de Cuba, que fue también un llamado a luchar contra quienes han impuesto al mundo un sistema que amenaza la supervivencia del planeta y de la especie humana.
Tras convocar a gobiernos y pueblos a salvar la paz, el líder de la Revolución aseguró que es posible vencer en la gran batalla por defender el derecho de todos a vivir.
Fuentes consultadas: Enciclopedia cubana EcuRed, Agencia Cubana de Noticias y sitio web Cubaperiodistas
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