A 60 años de los Juegos Panamericanos de Sao Paulo


Por Víctor Joaquín Ortega

Los IV Juegos Panamericanos fueron acogidos por la ciudad brasileña de Sao Paulo, del 13 de julio al 6 de agosto de 1963.  Según uno de los mejores periodistas deportivos cubanos de todos los tiempos, Enrique Montesinos, Cuba mostró allí “…un atisbo de su avance colocándose en la quinta plaza”. Todavía no se había desarrollado toda la potencia: en el clásico de  Cali 1971 llegó el gran salto.

En aquella justa de la tierra de la samba, la delegación caribeña conquistó 4 de oro, 6 de plata y 4 de bronce. En la anterior de este tipo ocupamos el octavo puesto del medallero al lograr 2-4-4. Solo subieron a lo más alto del podio la corredora Bertha Díaz y el pesista Juan Torres, ambos destacaron por esa época, lástima que su condición ciudadana no estuviera a la misma altura.

Bertha fue la mejor deportista de la Mayor de las Antillas antes del triunfo  de 1959, y no solo brilló en la gran fiesta americana efectuada en Chicago, donde se impuso en los 80 con vallas con 11.2 segundos. En Ciudad de México 1955 ganó el oro en los 60 lisos (7.5) y plata en los obstáculos (11.8).  Torres lideró la división ligera (67. 5) en la competencia  de la ciudad estadounidense al totalizar 347.5.

En Sao Paulo campeonaron EnriqueFiguerola en los 100 metros planos (10.2), la floretista Mireya Rodríguez, el púgil Roberto Caminero “Chocolatico Pérez” en la categoría ligera (60 kilos) y el equipo de pelota.

El Fígaro, primer cubano finalista olímpico de la prueba reina   (cuarto en Roma 1960) sería el primero de su patria en alcanzar una medalla después del triunfo revolucionario en la justa rescatada por Coubertin: plata en Tokio 1964 (10.2).  Mireya, la barbera de Carlos III, se convirtió en la primera  de la Mayor de las Antillas ganadora de una presea en  esta clase de contienda, y Chocolatico fue el primer boxeador dorado nuestro en la cita panamericana.

Integraron el conjunto de béisbol que reeditó la alegría del que nos representó en Buenos Aires 1951: Pedro Chávez, Miguel Cuevas, Urbano González, Jorge Trigoura, Manuel Alarcón ,  Lázaro Pérez, Tony González, Ramón Hechavarría, Ricardo Lazo, Aquino Abreu, Modesto Verdura, Raúl, el Güiro, Ortega, Daniel Hernández, Fidel Linares, Franklin Aspillaga, Santiago Scott, Antonio, Chucho, Rubio y Rolando Pastor. Enviaron a Estados Unidos y México a segundo y tercer peldaños.

Medallistas de plata: Miguelina Cobián en 100 y 200 con 11.5 y 24 segundos y al formar el colectivo de relevo corto junto a Irene Martínez, Fulgencia Romay y Nereida Borges: 46.4. Su coterráneo Ramón López Fleites las imitó en triple salto con 15.06. Subtitulares también el púgil Leonardo Alcolea (75 kilos) y el gimnasta Héctor Ramírez en manos libres.

Bronce para el as centrocaribe de los 110 con obstáculos; Lázaro Betancourt al conseguir 14,3 en la pista brasileña, Yolanda Williams en barras asimétricas y los seleccionados de gimnástica artística: Yolanda, Julia Uría, Lilia Wong, Yolanda Vega, Nancy Aldama y Teresa Oliva. Los hombres: Héctor, Octavio Suárez, Andrés González, Félix Padrón, Juan Pizarro y Luis de Pablo.

El periodista desea mencionar a dos rivales de otros países sobresalientes: la jabalinista chilena  Marlene Ahrens quien repitió su triunfo de Chicago 1959 (45.36), ahora al clavar el dardo a 49.93. En la cita olímpica de  Melbourne 1956 terminó segunda con envío de 50.38, únicamente superada por la soviética Inese Yaunzeme: 53.86.

El otro: Ralph Boston, de Estados Unidos, de los grandes saltadores de longitud. En Sao Paulo  el campeón olímpico  de Roma 1960(8.12) no falló: a lo más elevado del sitio de premiación: 8.11. Repetiría con  8.29 en el combate continental de Winnipeg 1967. Alcanzó plata en la magna cita de Tokio 1964  (8.03) y bronce en ´México 1968 (8.16).

El pesista José Flores, de Antillas Holandesas, tuvo la gloria de romper el récord mundial al levantar en fuerza (press) 162.5 kilos, pero quedó segundo entre los medio pesados (90 kilos) doblegado por Bill March (Usa) en el triatlón 460 por 457.5.

Prometo en un próximo comentario mostrar la calidad que enfrentaron nuestros representantes en Sao Paulo, calidad vibrante y crecida en esos torneos.

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente