La aparición de la COVID-19 tuvo un gran impacto en todo el mundo y Cuba no se mantuvo al margen de sus efectos. La enfermedad se esparció por el territorio nacional, dejando a su paso una cifra elevada de pacientes contagiados y un considerable número de fallecidos.
En medio de esa compleja situación, la nación antillana se encuentra inmersa en una campaña de intervención sanitaria, que le permitirá inmunizar a la población contra el virus SARS-CoV-2 y, al mismo tiempo, validar sus candidatos vacunales.
Para acercarnos a esa importante tarea, que comenzó a desarrollarse en la capital, a partir del pasado 12 de mayo, la COCO conversó con el funcionario de la sección de atención primaria de la Dirección de Salud en La Habana, el doctor Rubén García López de Villavicencio.
¿Qué criterios determinaron la selección de los municipios escogidos para iniciar la intervención sanitaria?
“Nos encontramos en medio de una intervención sanitaria a grupos y poblaciones de riesgo, como bien se ha definido por las principales autoridades de Salud del país. La comenzamos con el candidato vacunal Abdala, en los municipios Habana del Este, San Miguel del Padrón, Guanabacoa y Regla, debido a que han tenido una alta tasa de incidencia en los últimos meses y a que son territorios periféricos de la ciudad. Otro de los factores determinantes para su elección fue su densidad poblacional”.
¿Cómo está estructurado el cronograma de los restantes municipios?
“Los restantes municipios se dividirán en dos grupos, el primero de estos incluiría a Arroyo Naranjo, Boyeros y Cotorro, los cuales también tendrían su intervención sanitaria, con el candidato vacunal Abdala, durante esta última semana del mes. En junio se realizará la intervención sanitaria con Soberana 02 en el segundo grupo, que comprende los territorios de Playa, La Lisa, Marianao, Plaza de la Revolución y Diez de Octubre, los cuales se encuentran en la tercera fase de ensayo clínico”.
¿Cuáles son los protocolos establecidos para la intervención sanitaria?
“Ese proceso parte del consultorio del médico de la familia, lo que significa que todos los pacientes han pasado por un registro y una evaluación, por tanto, llegan al acto vacunal con una valoración previa de su médico. Se recibe al paciente en un área de espera donde se toma la presión, se comprueban los signos vitales y se realiza otro interrogatorio para precisar los criterios de exclusión y, una vez validado todo eso, pasa a recibir la dosis del candidato vacunal”.
¿Cuáles son los criterios de inclusión y exclusión definidos para recibir la dosis?
“Esta intervención incluye a los ciudadanos de ambos sexos, a partir de los 19 años de edad, y a las personas que voluntariamente otorguen su consentimiento para participar en este estudio. Por su parte, se excluyen a aquellos pacientes que hayan participado en los ensayos clínicos de un candidato vacunal diferente, en este caso, si ya recibió la dosis de Soberana, no podrá recibir la de Abdala”.
“De igual forma, quedarán fuera los pacientes con antecedentes documentados de COVID-19, los alérgicos a algunos de los componentes del candidato vacunal y los que tengan enfermedades crónicas o agudas descompensadas. El embarazo, el parto y el puerperio constituyen otra contraindicación, así como haberse administrado medicamentos inmunomoduladores en los 30 días previos a la vacunación”.
Comentaba que uno de los criterios excluyentes para esta intervención es no haberse contagiado de COVID-19, ¿qué se tiene previsto para los pacientes que hayan padecido esa enfermedad?
“Para esos pacientes existe el candidato vacunal Soberana Plus, el cual se encuentra en una fase de aplicación, con la finalidad de validarse como vacuna para aquellos pacientes convalecientes de la enfermedad. La tercera fase del ensayo clínico de Soberana 02 se realiza con Soberana Plus, por lo que pronto se confirmarán los parámetros de su administración en pacientes que hayan sido positivos al coronavirus”.
Una vez validados esos candidatos vacunales, ¿qué sector poblacional quedaría fuera de un futuro proceso de vacunación?
“La idea de desarrollar varios candidatos vacunales es orientarlos a diferentes grupos poblacionales. Partiendo de los criterios de exclusión que antes mencionaba, el sector poblacional menor de 19 años quedaría fuera del esquema de vacunación de Soberana o Abdala, sin embargo, para ellos ya hay un estudio de candidato vacunal que transita por una fase de ensayo en sus diferentes etapas, la cual, en un futuro próximo, será una vacuna para aplicarse en nuestros niños y adolescentes.
¿Cuáles han sido los síntomas más recurrentes en los pacientes que se han puesto la dosis?
“No hemos presentado reacciones adversas graves de manera significativa. La hipertensión arterial previa ha sido lo más común, sin embargo, esto está relacionado más bien con el temor de recibir la dosis. Por otra parte, en cada puesto de vacunación existe una sala de urgencias y un surtido de medicamentos aprobados por el Ministerio de Salud Pública para poder abordar, de manera inmediata, cualquier reacción adversa que pueda presentarse”.
La intervención sanitaria del candidato vacunal Abdala constará de tres dosis, ¿por qué es necesario recibir las tres y no solo una?
“Abdala cuenta con tres dosis que se administran cada catorce días después de recibir la primera. En estas porciones, la cantidad de anticuerpos aumenta de manera progresiva hasta llegar a los niveles inmunológicos necesarios para combatir la enfermedad. Recordemos que la principal función de la vacuna es evitar la infección, no la transmisión, por tanto, una vez vacunados, tendremos mejor respuesta ante la aparición del coronavirus. Esto no quiere decir que olvidemos o descuidemos el resto de las medidas higiénico sanitarias que tenemos para combatir la pandemia”.