El ballet suspende las funciones que tenía previstas para este fin de semana producto de la compleja situación epidemiológica de La Habana. Foto: Tomada de Internet.
Por: Carmen Larduet
Si bien el escenario actual de crisis sanitaria que afecta al mundo debido a la COVID-19, no es comparable con lo que sufre nuestro país en ese sentido; se impone frenar la transmisión del SARS-COV2 en La Habana y en el resto de la isla.
Uno de los sectores más afectados con este retroceso es el artístico. Volveremos a posponer las actividades culturales en teatros, salas cinematográficas y plazas, por la actitud de personas con baja percepción de riesgo ante la letal enfermedad.
Sin embargo, los artistas cubanos
fueron de los primeros en reinventar sus formas de hacer para ayudar al país en momentos difíciles, además transmitieron un virtual y necesario mensaje de aliento al pueblo hasta llegar a una nueva normalidad.
Entonces, ¿por qué no ser también de los primeros en sumarnos a la prevención y combate de la pandemia con mayor responsabilidad?
Por un tiempo nos faltará el intercambio social presencial, el disfrutar una obra de teatro o la presentación de nuestro grupo favorito en vivo.
No obstante, estamos a tiempo de salvar nuestras vidas y la de los demás, con actitudes positivas y una buena disposición.
Con disciplina y responsabilidad daremos, de nuevo, un sí por Cuba con más cultura y más salud.