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| Quienes idearon la farsa de San Isidro pretenden crear conflictos entre los artistas cubanos y el Gobierno, hecho que no se logrará porque los intelectuales, hace mucho tiempo, decidieron estar de parte de la verdad. Foto: Tomada de Internet. |
El artista que logre con su obra transmitir un mensaje sensible a los ojos del sujeto ha trazado un puente de comunicación cuya utilidad y valor es perdurable.
Asà dijo el Comandante en Jefe Fidel Castro en uno de los discursos en el que llamaba a su audiencia a aumentar la capacidad de análisis y percepción.
En los tiempos actuales, algunos de los que alcanzamos esa suficiente madurez para comprometernos con el verdadero papel del arte en la cultura enfrentamos una nueva modalidad de conflicto, esta vez no convencional.
Este tipo de guerra no asombra al paÃs; pero si lo alerta. Es hora de dejar las cómodas posiciones y definir quien está o no con Cuba. La indecencia, la vulgaridad y la falta de respeto aquà no tienen cabida alguna.
El arte como elemento imprescindible de la cultura es reflejo de la realidad, pero una realidad estética; es una muestra del creador que expresa sus emociones o ideologÃa con fines educativos o cognitivos. Jamás será imagen de falsas especulaciones callejeras pagadas.
José Martà entendÃa el arte como un sustento para la cultura y el espÃritu, una herramienta capaz de preservar naciones y asà es.
Con la mira en ese principio, Cuba apuesta por el diálogo entre aquellos que sólo necesitan intercambiar criterios, para mejorar un proceso social que fue favorable al cubano a partir de 1959.
Las otras actitudes no son dignas de conversación. Los que estamos definidos por el amor hacia nuestra Isla no permitiremos el chantaje aquÃ, porque somos Cuba y Cuba es cultura.
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| El Presidente cubano, Miguel DÃaz-Canel, intercambió con los jóvenes y compartió con artistas en la Tángana del parque Trillo, en Centro Habana. Foto: Tomada del Facebook de Ileana Ortega. |