Autor: Gabriel García Galano
Con el final de la reciente fecha del fútbol europeo, la atención se ha centrado en dos de las ligas más importantes del Viejo Continente. De una llama el hecho de que los que corren por alzar el trofeo no son los protagonistas de siempre. De otra, la manera en que las cosas han cambiado en un panorama que tres semanas atrás parecía decidido.
Por eso nos posamos en Inglaterra y España, donde los últimos resultados han dejado el último tramo abierto para los cinco equipos que aún pueden pugnar por llevarse el gato al agua en esta temporada 2015-2016.
En la Premier, con la goleada del Tottenham este lunes en su viaje al Britannia Stadium para enfrentar al Stoke City, los de Roberto Pochettino han querido empezar a soñar con el milagro, tras ponerse a solo cinco puntos del Leicester City con doce unidades aún en disputa.
De la mano de Harry Kane y Eric Lamela, los Spurs deberán ganar todo lo que les queda por delante para arrebatarle la cima a los Foxes de Ranieri, quienes llevan unas cuantas fechas en la cima.
El Leicester por su lado tiene la clave en ganar tres encuentros de los cuatro restantes si pretenden dejar a los de Londres sin opciones, en una pelea donde Arsenal fue el último en despedirse de sus posibilidades al empatar con el Crystal Palace y quedarse en 60 unidades.
De esta forma, los inquilinos del King Power Stadium deberán apretar en los finales para no verse superados por un Tottenham que desea alzar su primer título liguero en cincuenta y cinco años, lo que sería una lástima por el sabor que le han puesto este año a la Premier gracias a su insólito liderazgo.
Cruzando el Canal de la Mancha nos encontramos entonces con una Liga BBVA más interesante que nunca, sobre todo por la mala racha del Barcelona que les ha llevado a perder el cómodo colchón de diez puntos que exhibían sobre el segundo y tercer lugar.
La recaída culé desde la derrota en el Clásico, pasando por la eliminación europea, ha llevado al conjunto de Luis Enrique a perder 4 de los últimos 5 partidos que han jugado, practicando un fútbol más bien mediocre, abundante en posesión del balón pero falto de concreción y por tanto, de goles.
Al parecer el tridente mágico se ha visto agotado por el poco descanso que le ofrece su técnico y pasa por la mayor de sus sequías, cosa que poco puede remediar el resto de la banca y de los regulares. Ahora deberán desplazarse a Riazor a enfrentar al Deportivo, un movimiento siempre peligroso para cualquier equipo y escenario donde un resbalón más podría complicar el trabajo de toda una campaña.
A su favor tienen que los equipos de Madrid, Real y Atlético, sus más cercanos perseguidores, tienen partidos más complicados cuando se midan al Athletic de Bilbao y Villareal respectivamente, en jornada de intermedio de semana que bien puede servir para acabar de definir la liga este año.
Así que ya sabe, si usted es fanático del fútbol y gusta de mantener los nervios hasta el final, siga de cerca la próxima fecha, porque promete muchísimas emociones en el camino a definir los restantes campeones de las principales ligas de Europa.