Por: María Karla Fernández Mustelier
Una conmovedora ceremonia en el Cementerio Colón, encabezada por autoridades de la capital y familiares de las víctimas, reafirmó el reclamo de justicia y la memoria de las 73 personas asesinadas en un atentado terrorista hace 49 años.
Con una peregrinación en el Panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias del Cementerio Colón, el pueblo habanero rindió tributo a las víctimas del Crimen de Barbados, en el 49 aniversario del sabotaje al vuelo 455 de Cubana de Aviación.
El acto conmemorativo, que marca el Día de las Víctimas del Terrorismo de Estado contra Cuba , fue encabezado por Liván Izquierdo Alonso, Primer Secretario del Partido en La Habana, y Yanet Hernández Pérez, Gobernadora de la capital.
Las palabras centrales de la conmemoración estuvieron a cargo de Jorge Luis Fajardo Casas, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Alimentaria y la Pesca . Fajardo calificó el hecho como "un agravio a la paz, aún fresco en el recuerdo de la nación como símbolo de la crueldad inhumana del imperialismo".
En su intervención, el dirigente sindical evocó la sentencia del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, pronunciada durante el sepelio de las víctimas: "…No podemos decir que el dolor se comparte. El dolor se multiplica. Millones de cubanos lloramos hoy junto a los seres queridos de las víctimas del abominable crimen. ¡Y cuando un pueblo enérgico y viril llora, la injusticia tiembla!" .
Fajardo también se refirió a la inclusión de Cuba en la lista unilateral de países patrocinadores del terrorismo por parte de Estados Unidos, calificándola de "desvergüenza".
El 6 de octubre de 1976, Cuba vivió una de sus páginas más tristes cuando el vuelo 455, que realizaba la ruta desde Georgetown con escalas en Trinidad, Barbados y Jamaica, fue destruido en el aire por un sabotaje con explosivos . La explosión en las costas de Barbados cobró la vida de 73 personas: 57 cubanos, 11 guyaneses y cinco norcoreanos.
Entre las víctimas se encontraban 24 integrantes del equipo juvenil cubano de esgrima, que regresaban al país tras haber ganado todos los títulos en el Campeonato Centroamericano y del Caribe de la disciplina . Estos jóvenes atletas, llenos de talento y sueños, se convirtieron en símbolo eterno de una tragedia que aún duele.
Investigaciones históricas han demostrado que el crimen fue ejecutado por terroristas de origen cubano Luis Posada Carriles y Orlando Bosch Ávila, quienes actuaron al servicio de agencias de inteligencia de Estados Unidos . Los autores materiales, Freddy Lugo y Hernán Ricardo, confesaron su participación y señalaron a Posada y Bosch como sus mandantes.
Documentos desclasificados de la CIA confirmaron que la agencia "tenía inteligencia concreta de avanzada, tan temprano como junio de 1976, sobre planes de grupos terroristas cubanos exiliados, de atacar con una bomba un avión de línea de Cubana".
A pesar de las pruebas, los autores intelectuales disfrutaron de impunidad en Estados Unidos . Bosch fue absuelto en Venezuela y vivió libre en Miami hasta su muerte, mientras Posada Carriles huyó de prisión en Venezuela, ingresó ilegalmente a EE.UU. y fue liberado en 2007, viviendo protegido hasta su fallecimiento.
Durante la ceremonia en el Cementerio Colón, se depositaron ofrendas florales en nombre del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución, y de Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República.
Los asistentes, entre los que se encontraban familiares de las víctimas, representantes de organizaciones estudiantiles, de masas y de diferentes entidades, reafirmaron el compromiso irrevocable con la Patria y acompañaron a los familiares hasta donde descansan sus seres queridos.
El Crimen de Barbados constituye uno de los momentos más dolorosos de la historia reciente de Cuba, y cada vez que la fecha de acerca se convierte en una jornada para recordar a las víctimas, denunciar la impunidad y reafirmar que, como expresó Jorge Luis Fajardo, "Cuba no olvida, y en la honra y denuncia de los caídos se erige un pilar de la Patria".