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| Foto: Cubadebate |
Por: Leonel José Pérez Peña
En medio de los sistemáticos y prolongados apagones que estamos sufriendo los cubanos, es muy difícil percatarnos de los resultados en el cambio de la raíz energética que se está produciendo en el país, lo que nos proporcionará más soberanía e independencia.
Se ha convertido viral por estos días, en las redes sociales el avance histórico de Cuba con la instalación de sistemas de almacenamiento energético, similares al proyecto piloto de la Isla de la Juventud, resultando un gran paso de avance en este sentido y otro golpe duro al bloqueo yanqui.
Con el apoyo de China, Japón y Rusia se instala en Subestaciones Estratégicas, el Sistemas BESS (Battery Energy Storage Systems), con autonomía de 1-4 horas de almacenamiento; de iones de litio con capacidad inicial de 10-20 MW, lo que permitirá estabilizar el suministro en horas de mayor demanda e incluso, guardar la energía que se obtenga en las horas de mayor radiación, para su uso nocturno. Estas baterías se están ubicando en Cueto Holguín, Bayamo, y en el Cotorro, en La Habana.
Las subestaciones seleccionadas tienen definida su estrategia: Cueto, zona agrícola-industrial, clave para estabilizar el oriente cubano, tanto desde el punto energético como en la producción agroindustrial; Bayamo (Granma) vital para el suministro a municipios con alta vulnerabilidad a apagones: Cotorro: Respaldará hospitales y centros industriales del área metropolitana, además, La Habana es el corazón de la red nacional con lo que se logra reducir la posibilidad del colapsos del Sistema de Distribución en la capital y al resto del país.
Las afectaciones en el servicio eléctrico de estos tiempos, por falta de generación asociada a la falta de combustible y a las roturas, por el bloque yanqui que impide un flujo sistemático de combustibles y piezas de repuesto, no pueden empañar la gran hazaña que está logrando Cuba, con estos acuerdos, con lo que conseguirá bienestar a la sociedad y desarrollo económico al país.
No nos dejemos engañar; sí hay ocupación del Estado por resolver el problema de generación eléctrica. Esta es la respuesta a tantas preguntas al respecto, a veces mal intencionadas. Lo cierto es que, al enemigo de siempre, no se le puede enfrentar ofreciéndole información de este tipo, porque acaban saboteando los proyectos para evitar su aplicación, porque saben que ellos nos llevarán al desarrollo.
El Programa del Estado Cubano para el cambio de la raíz energética, está en marcha y a buen paso, con resultados ya palpable los que se harán más notable poco a poco, y así no tendremos que estar dependiendo de la importación de hidrocarburos para producir electricidad; ese combustible entonces estará destinados a otros sectores para el desarrollo estratégicos, y es una forma más de concretar la independencia y la soberanía de la nación.
Nuestros enemigos de siempre, tratan de descertificar estos logros, pero nosotros, como siempre, al lado de José Martí aseguramos, en silencio ha tenido que ser porque hay cosas que para lograrlas han de andar ocultas