Por: Cáliz More Leal
A la edad de 10 años conocà de la muerte del Ché, sentada junto con mis padres ante el televisor que mostraba una conglomerado de personas en silencio escuchando a Fidel.
Era el 18 de octubre de 1967, y aunque, le aseguro , me daba cuenta de que era algo importante por la expresión de madre y padre, no supe hasta tiempo después quien fue Ernesto Guevara de la Serna, apodado por los cubanos El Che.
Cuando el 12 de julio de 1997 llegaron los valiosos restos de Ernesto Che Guevara y parte de sus compañeros en la guerrilla boliviana , después de largos años de búsqueda y trabajo, yo estaba ahÃ, como muchas otras personas, a lo largo del Malecón habanero.