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| Foto tomada de la red social X. |
Por: Ania González Rodríguez
Entre los episodios de especial importancia histórica de un día como este 18 de abril salta a la vista que, en 1819, nace Carlos Manuel de Céspedes y López del Castillo, el Padre de la Patria.
Imposible no remitirse entonces a los datos de su biografía y otros artículos o estudios que ilustran su trayectoria vital, entre ellos, resalta un dato curioso que siempre quedaba en la interrogante: ¿Y a qué hora vino al mundo el gran caudillo bayamés?
Cuentan los historiadores que la hora del natalicio de Carlos Manuel de Céspedes no aparece en su partida de bautismo, sin embargo, ha sido divulgada tras investigaciones de hace pocos años por parte de museólogos, novelistas y astrólogos.
Por ejemplo, el museólogo Aldo Daniel Naranjo Tamayo plantea que ocurrió a las 23:00 (hora local) y el novelista Evelio Traba Fonseca aduce que fue exactamente "dos horas antes de la medianoche", o sea, a las 22:00 (hora local).
Ahora, desde el punto de vista astrológico se llegó a la conclusión unificada de que Carlos Manuel de Céspedes, Padre de la Patria cubana, nació en la Villa de San Salvador de Bayamo, el día 18 de abril de 1819, a las 19 horas, 41 minutos y 12 segundos.
Carlos Manuel, quien nació en el seno de una de las familias más adineradas de Bayamo, cultiva su inteligencia en los mejores colegios de su tiempo y se gradúa en 1838 como bachiller en Derecho Civil, en la Universidad de La Habana y, en 1840, obtiene en Barcelona el título de Abogado del Reino.
Mas, para quienes le estudian y advierten cuánto cambió Céspedes el rumbo que le trazaban sus orígenes y su condición de hombre acaudalado, destacan que fuera él el que inició en Cuba la lucha por la independencia nacional y el primer presidente de la República en Armas.
Y surgen las mismas preguntas que el entrañable historiador Eusebio Leal se hiciera en una de sus oratorias para motivar sobre la biografía de Céspedes: "¿Cómo conciliar tales orígenes nobiliarios con el acto de abandonarlo todo? ¿Cómo pudo este hombre desprenderse de las cadenas doradas de los bienes materiales para infundir ánimo a los que carecían de ellos y para tomar la determinación?".
El propio Leal responde: "Las revoluciones nacen de la idea y de la cultura. No es posible comandarlas sin el conocimiento del mundo. Desde Céspedes hasta Fidel, nos sorprende esa vocación por la erudición, que ambos consideraron fundamentales para poder enfrentar el desafío de su tiempo".
Y continúa su argumento cuando expresa: "Ambos fueron conocedores profundos de la Ley, del Derecho Romano, de los clásicos de la antigüedad, del pensamiento revolucionario a lo largo de los años; ambos fueron partidarios de librar la gran batalla por una emancipación que quedó inconclusa cuando el propio Padre de la Patria –como se llamó–,al que los campesinos saludaban como 'padre' en el campo, 'el padre de todos nosotros', 'el Presidente viejo', subió al Gólgota aquel día de febrero de 1874 (día de su muerte) dispuesto a combatir hasta morir, en cumplimiento de su palabra comprometida".
A tono con este día histórico, el titular del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, expresó hoy en la red social X, palabras que son un oportuno cierre para esta efeméride: "En el aniversario 205 de su natalicio, recordamos al Padre de la Patria y primer presidente de la República en Armas, Carlos Manuel de Céspedes, quien nos legó su ímpetu e inclaudicable moral, en la lucha por la independencia y soberanía de Cuba".
Hoy se cumplen 205 años del natalicio del #PadreDeLaPatria, cuyo ímpetu adelantó fecha al despertar de la rebeldía, y al inicio de la #RevoluciónCubana, que ha sido garantía de libertad y soberanía, desde el 10/10/68 hasta nuestros días. pic.twitter.com/b5UcKvy5Ld
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) April 18, 2024
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