Anier García, cubano ganador del oro olímpico en 110 metros con vallas en Sidney 2000. Foto: Reuters. |
Por Víctor Joaquín Ortega
Aseguro el disfrute en estas aguas. No se quede en la orilla. Busque la verdad. Es mucho más compleja. El medallero deportivo no dice todo. Es más: lo sabroso suele quedarse fuera. En algún escondrijo. Le muestro este manantial. Su sed será calmada. Fortificará lo mejor de usted.
La tendinitis no podrá conmigo. Este maldito dolor intenta dejarme sin ir a Los Ángeles 1984. El boicot a Moscú 1980 no me dejó mostrar cuánto había avanzado. Que no se diga que Evelyn Ashford se achicó. Voy a vencer esta dolencia. Aguanto. Avanzaré. Me curaré. El médico, el masajista contribuyen.
Los Ángeles 1984 en el horizonte. Han quedado lejos los inicios de Evelyn. Hasta corría con los hombres en el relevo de su instituto. Sobresalió en una universidad californiana. Primera incursión internacional victoriosa: los VIII Juegos Panamericanos. San Juan la ve triunfar en 100 y 200 metros planos, en 1979, con sendos récords para este tipo de justa: 11.05 segundos en las preliminares (11.07 en la final) y 22.24 en la lid decisiva con demasiado viento a favor. En la anterior fase, la nueva plusmarca de 22.45.
Quiere confirmar su vanguardia en la cita angelina. Han pasado 8 años de aquel quinto puesto en Montreal 1976. Tenía 19 abriles. Y la lesión en la pierna ahora. Se apresta a competir en la distancia más corta.
¡Zummm! No me deja terminar la frase. Vence con 10.97 y quiebra la marca olímpica. Integra el colectivo del 4x100 como cerradora. Otro galardón máximo. Tiempo: 41.65.
No se conforma. Seúl 1988. Plata en la prueba reina con 10.83, solo superada por el fenómeno Florence Griffith con 10.54. Su coterránea mantiene ese tiempo como récord del orbe en 2024. Sin embargo, falleció muy joven. Evelyn, finalista y oro de nuevo en el relevo: 41.98. Se mantuvo activa: fue una de las cuatro integrantes de la lucha por el cambio de batón en Barcelona 1992, donde dominaron con 42,11.
A la Cumbá le quisieron robar el oro. Estaba feliz Yumileidi con su premio plateado en Atenas 2004. Su balazo de 19.59 metros únicamente había sido superado por la rusa Irina Hatleastad. Y un subtítulo en la magna fiesta es algo grande. Pues al detectarse el dopaje de la aparente ganadora, no pudo birlar la corona a la verdadera titular.
La alegría fue mayor para la guantanamera. Tuvo la gloria adicional de ser la primera campeona olímpica galardonada en el santuario de Olimpia, en el Peloponeso, donde se realizaban los Juegos anteriores, rescatados por Pierre de Coubertin, cuando se prohibía la participación de las mujeres.
Anier García noquea a los escépticos. El as de los 110 con vallas en la gran fiesta acogida por Sydney 2000. Allá subió a lo más alto del podio con 13 segundos. Sin embargo, más impactante y rico es el bronce alcanzado cuatro años más tarde por sus 13.20 en la capital helena.
No todos creían en sus posibilidades, entre ellos algunos funcionarios. Anier sufrió cierta frialdad en el trato. A pesar de eso y algunas lesiones, terminó tercero con un bronce dorado, y puso a dormir por más de 10 segundos a los descreídos.
Los Ángeles 1984 en el horizonte. Han quedado lejos los inicios de Evelyn. Hasta corría con los hombres en el relevo de su instituto. Sobresalió en una universidad californiana. Primera incursión internacional victoriosa: los VIII Juegos Panamericanos. San Juan la ve triunfar en 100 y 200 metros planos, en 1979, con sendos récords para este tipo de justa: 11.05 segundos en las preliminares (11.07 en la final) y 22.24 en la lid decisiva con demasiado viento a favor. En la anterior fase, la nueva plusmarca de 22.45.
Quiere confirmar su vanguardia en la cita angelina. Han pasado 8 años de aquel quinto puesto en Montreal 1976. Tenía 19 abriles. Y la lesión en la pierna ahora. Se apresta a competir en la distancia más corta.
¡Zummm! No me deja terminar la frase. Vence con 10.97 y quiebra la marca olímpica. Integra el colectivo del 4x100 como cerradora. Otro galardón máximo. Tiempo: 41.65.
No se conforma. Seúl 1988. Plata en la prueba reina con 10.83, solo superada por el fenómeno Florence Griffith con 10.54. Su coterránea mantiene ese tiempo como récord del orbe en 2024. Sin embargo, falleció muy joven. Evelyn, finalista y oro de nuevo en el relevo: 41.98. Se mantuvo activa: fue una de las cuatro integrantes de la lucha por el cambio de batón en Barcelona 1992, donde dominaron con 42,11.
A la Cumbá le quisieron robar el oro. Estaba feliz Yumileidi con su premio plateado en Atenas 2004. Su balazo de 19.59 metros únicamente había sido superado por la rusa Irina Hatleastad. Y un subtítulo en la magna fiesta es algo grande. Pues al detectarse el dopaje de la aparente ganadora, no pudo birlar la corona a la verdadera titular.
La alegría fue mayor para la guantanamera. Tuvo la gloria adicional de ser la primera campeona olímpica galardonada en el santuario de Olimpia, en el Peloponeso, donde se realizaban los Juegos anteriores, rescatados por Pierre de Coubertin, cuando se prohibía la participación de las mujeres.
Anier García noquea a los escépticos. El as de los 110 con vallas en la gran fiesta acogida por Sydney 2000. Allá subió a lo más alto del podio con 13 segundos. Sin embargo, más impactante y rico es el bronce alcanzado cuatro años más tarde por sus 13.20 en la capital helena.
No todos creían en sus posibilidades, entre ellos algunos funcionarios. Anier sufrió cierta frialdad en el trato. A pesar de eso y algunas lesiones, terminó tercero con un bronce dorado, y puso a dormir por más de 10 segundos a los descreídos.
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