La Palma Real es el árbol nacional de Cuba. Foto: Internet |
Por: Leonel José Pérez Peña
Si todos los poetas del mundo tuvieran ahora el privilegio del que yo gozo, seguramente escribieran grandes poesÃas.
Estoy sentado en el paseo de la avenida 51, entre 202 y 206, en el municipio La Lisa. Y resulta tan atractivo el entorno fÃsico, que invita a pulsar la lira y dedicar los mejores versos a las palmas que desde aquà se divisan.
La Palma Real es sÃmbolo de esta demarcación y abunda en toda la geografÃa local, como si estas tierras fueran su hábitat natural. De hecho, forma parte del escudo de la localidad, indicativo de la espiritualidad de su gente, defensora las tradiciones culturales surgidas de lo campestre y lo citadino.
El escudo de La Lisa. Foto: Internet |
Junto a la Palma Real, la Guitarra que marca la décima, como expresión popular y tradicional de un pueblo que comenzó a formarse desde el corral y los hatos de la ganaderÃa en el ya lejano 1723, cuando se funda El Cano, primer pueblo en medio de esta bella planicie, el 10 de septiembre de 1723.
Aquà están los versos de un campesino poeta que vienen a confirmar que Palma Real, Guitarra e Identidad Nacional están estrechamente vinculadas.Juan Benigno (Ningo) Reyes Cruz reside actualmente en la capital de todos los cubanos, y de su manantial poético aún brotan versos como estos a nuestro árbol nacional, con el sabor a café servido en jÃcara.
Me gusta del manso rÃo
verle el agua cristalina,
y la brisa vespertina
acariciando el macÃo.
Me gusta ver el envÃo
del agua por la chorrera,
y de la misma manera
me gusta ver a mi antojo,
luciendo un racimo rojo
el cuello de la palmera.
Verdaderamente nuestra Palma es la más bella y tiene un gran sÃmbolo historico
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