Por: Eusebio Casañas
Con resultados incipientes, a la vez que alentadores, el Partido y el Gobierno de la capital están desarrollando un sistema de acciones con actores económicos estatales y no estatales dirigidas a la concertación de precios para combatir los que resultan excesivos y abusivos, priorizando la esfera alimentaria.
Resulta innegable que el establecimiento de precios a partir de conciliaciones objetivas en las que productores de bienes y de servicios logren recuperar sus gastos y obtener ganancias con margenes de utilidad correspondientes a sus procesos, pero sin expoliar arbitrariamente los bolsillos y las carteras de cubanos y cubanas se estará enfrentando con éxito el efecto dañino del proceso inflacionario.
Aun cuando conocemos que la solución definitiva solo llegará con el equilibrio de la oferta y la demanda, en la medida en que se logre extender acciones similares al resto de los actores económicos el aporte será cada vez más significativo para el incremento necesario del valor de compra de nuestra moneda nacional, al tiempo que se continúa trabajando intensamente en la "resistencia creativa" que nos conduce hacia logros superiores
* El autor es vicepresidente de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de La Habana
LLHM