Fotos: Joyme Cuan/Tribuna de La Habana.
Por: Redacción Digital
El primer secretario del Partido Comunista de Cuba en la ciudad, Luis Antonio Torres Iríbar, y el gobernador de la urbe, Reinaldo García Zapata, recorrieron este jueves varios centros productivos, así como sitios y lugares de interés económico y social en los municipios de Habana del Este y Guanabacoa.
De acuerdo con un reporte del periódico Tribuna de La Habana, uno de los lugares visitados lo constituyó la Empresa Agropecuaria Bacuranao, fundada a finales de la década del 60, del pasado siglo, por el Comandante en Jefe Fidel Castro.
En un intercambio de las máximas autoridades capitalinas con directivos de la entidad, agregó la propia fuente, Torres Iríbar recalcó que la resistencia exitosa de este país pasa por el crecimiento de la ganadería y la agricultura.
También les pidió trabajar para devolverle el esplendor a la institución y llevarla al lugar insignia, que ocupara dentro del sector en la capital cubana e incluso de la Isla.
La Empresa Agropecuaria Bacuranao tiene su fuerte en la ganadería vacuna, pero incursiona también en el fomento y desarrollo de la variante bufalina, cultivos varios, acuicultura, ganado menor, y prestación de servicios afines, en 12 Unidades Empresariales de Base (UEB), igual número de Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) y 26 Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS).
Sus poco más de mil 500 actuales trabajadores están llamados a detener el deterioro de los indicadores que miden su eficiencia y cumplir el propósito de garantizar los mayores volúmenes de carne, leche, viandas, hortalizas, granos y frutales que consume la provincia.
Tras un cambio de dirección ya se nota un renacer, que se refleja en el valor agregado bruto, productividad promedio por hombre, salario medio, en incluso en los volúmenes de producción, pero todavía es insuficiente, además de exhibir una situación financiara que, aunque mejora, todavía está lejos de ser eficiente.
En consecuencia, Torres Iríbar instó a recuperar todo lo que el líder de la Revolución había creado y puesto en manos del colectivo, como una cuestión moral y principios.
Es menester -dijo- aprovechar todas las oportunidades, sobre todo en una empresa que abarca varios frentes, tiene minindustrias, clínicas veterinarias, unidad docente, lo cual le permite un crecimiento profesional, ofrecer servicios atractivos en todos los municipios de la capital, incluso en aquellos donde no existe la ganadería, cerrar ciclos productivos, y llegar a exportar y sustituir importaciones.
Igualmente, estuvieron en el Complejo Deportivo Antonio Guiteras y la Casa de Cultura René Álvarez.
En la primera instalación, pudieron apreciar las remodeladas áreas de yudo y boxeo, gimnasio de musculación, salón de ajedrez y el terreno de básquet.
Por otra parte, avanzan las labores restauradoras en el área de béisbol, que ya presta servicios para niños, jóvenes y personas del resto de los grupos etarios hasta la tercera edad, quienes pueden acudir en cualquier horario, incluso de noche (cuentan con iluminación), todos los días de la semana.
Entretanto, la institución artística, casi a punto, abrirá sus puertas en un futuro inmediato, totalmente restaurada (cubierta, marquetería, redes eléctricas, hidráulicas y sanitarias), con las aulas y salones de siempre y otras áreas nuevas, que facilitarán cultivar valores, enseñar y aprender, sanar y entretener, danza, música, literatura y artes pláticas.
En la llamada Zona Industrial de Berroa, enclavada en las afueras de la localidad, Torres Iríbar y García Zapata visitaron la Empresa Mixta cubano-española Suchel-Camacho S.A.
Allí recorrieron las plantas donde se conforman los jabones y envasan perfumes, geles, acondicionadores, cremas corporales y dental, algunos de estos artículos destinado a la canasta básica y los otros para el mercado liberado, en moneda nacional y divisas.
Por último, la comitiva se trasladó hasta la finca de Rogelio Ramos, en Campo Florido, poblado rural de Habana del Este, quien pertenece al grupo de avanzada entre los 151 socios de la CCS Marcelo Salado.
En sus tierras, 3,17 hectáreas, cosecha volúmenes de consideración y con elevados rendimientos, lo mismo de tomate, plátano (fruta y vianda), cebolla que frijol, las variedades que habitualmente planta.
Y también hasta la Unidad Típica Genética Bufalina Número 33, en Guanabacoa, quizás la mejor de las nueve lecheras con que cuenta a la UEB Victoria de Girón, llegaron los visitantes.
En respuesta a las interrogantes de Torres Iríbar y García Zapata se supo que, para cumplir con sus propósitos y compromisos, la vaquería cuenta con 104 cabezas total, de las cuales 56 son búfalas, y de ellas 46 en ordeño, para una producción diaria de 200 litros, un promedio de 6,6 por animal.
Torres Iríbar orientó a las autoridades ganaderas de la provincia diseñar un proyecto dirigido a rescatar todas o al menos la mayoría de las vaquerías que un día existieron en la capital cubana y pidió acondicionar las existentes, de manera que realmente se parezcan a aquellas vaquerías de entonces.
Texto: Elías Argudín
Tomado de: Tribuna de La Habana
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