Por: Lien Martí
La reapertura del Aeropuerto Internacional José Martí, de La Habana, demanda mayor prevención de viajeros y sus familiares. Foto: Tomada de Internet.
Disímiles reacciones ha provocado el anuncio de la reapertura del Aeropuerto Internacional José Martí, luego de varios meses sin recibir vuelos comerciales, debido a medidas tomadas con el objetivo de frenar la pandemia de la Covid-19.
Ciertamente, el panorama internacional sigue siendo difícil, muchos países europeos volvieron a aplicar restricciones y, en los Estados Unidos, las cifras de contagios tienen niveles cada vez más alarmantes, pero la economía cubana necesita dinamizarse.
La vacuna contra la Covid-19 tarda aún en llegar y esa enfermedad nos ha enseñado que, cuando existe un ápice de confianza y descuido, afloran grandes complicaciones y se extiende el contagio.
Ahora la labor del personal sanitario será esencial, pero todos debemos y podemos colaborar cumpliendo con las medidas implementadas por nuestro gobierno para el bienestar de cada uno de los que viajan.
De esa manera se protege a nuestros seres queridos a sabiendas de que hay que extremar el autocuidado y la responsabilidad, en momentos de seguir el llamado del presidente Miguel Díaz-Canel, de pensar como país.