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| Foto: Inder. |
Por: Tony Díaz
El béisbol cubano amaneció este viernes de luto con la partida de Armando Capiró Lafferte, uno de los más destacados toleteros de la capital y figura imprescindible en las Series Nacionales y en los equipos Cuba.
Fueron muchos los cubanos, especialmente los capitalinos, quienes disfrutaron de sus cuadrangulares, su envidiable brazo y su personalidad, que marcaron las hazañas que le ganaron un lugar destacado entre los inmortales del béisbol cubano.
El “Capi”, como muchos le llamaban, brilló en 14 Series Nacionales, acumulando 162 jonrones, 677 carreras impulsadas, 186 dobles, 47 triples y 609 anotaciones.
Fue líder en carreras impulsadas en tres temporadas y firmó récords memorables, como los 22 cuadrangulares en 78 juegos en 1973, además de ser el primer pelotero en superar los 20 jonrones en un torneo cubano.
Su impronta internacional también fue notable: seis títulos mundiales, múltiples lauros regionales y continentales, y actuaciones que lo colocaron entre los cien atletas más destacados del siglo XX en Cuba.
Defendió con orgullo los colores de Industriales, Metropolitanos y Habana, equipos emblemáticos de la capital. Nacido el 22 de marzo de 1948, Capiró se convirtió en un referente por su elegancia al bate y su disciplina en el terreno. En la temporada 1972-73, fue elegido Jugador Más Valioso, y su nombre quedó ligado a la historia de los grandes sluggers de la Isla.
Su cadáver reposa en la funeraria de Santiago de las Vegas, donde familiares, amigos y compañeros de equipo le rinden tributo antes del entierro previsto para las 10:30 a. m. en la necrópolis de Colón.
Hoy, autoridades deportivas, medios de prensa y aficionados capitalinos se suman al homenaje nacional e internacional a un hombre que, más allá de sus números, fue un símbolo de humildad y respeto. Su legado permanecerá en cada batazo que evoque la grandeza de nuestro béisbol.
El “Capi”, como muchos le llamaban, brilló en 14 Series Nacionales, acumulando 162 jonrones, 677 carreras impulsadas, 186 dobles, 47 triples y 609 anotaciones.
Fue líder en carreras impulsadas en tres temporadas y firmó récords memorables, como los 22 cuadrangulares en 78 juegos en 1973, además de ser el primer pelotero en superar los 20 jonrones en un torneo cubano.
Su impronta internacional también fue notable: seis títulos mundiales, múltiples lauros regionales y continentales, y actuaciones que lo colocaron entre los cien atletas más destacados del siglo XX en Cuba.
Defendió con orgullo los colores de Industriales, Metropolitanos y Habana, equipos emblemáticos de la capital. Nacido el 22 de marzo de 1948, Capiró se convirtió en un referente por su elegancia al bate y su disciplina en el terreno. En la temporada 1972-73, fue elegido Jugador Más Valioso, y su nombre quedó ligado a la historia de los grandes sluggers de la Isla.
Su cadáver reposa en la funeraria de Santiago de las Vegas, donde familiares, amigos y compañeros de equipo le rinden tributo antes del entierro previsto para las 10:30 a. m. en la necrópolis de Colón.
Hoy, autoridades deportivas, medios de prensa y aficionados capitalinos se suman al homenaje nacional e internacional a un hombre que, más allá de sus números, fue un símbolo de humildad y respeto. Su legado permanecerá en cada batazo que evoque la grandeza de nuestro béisbol.