Imagen tomada del Portal de la Radio Cubana |
Por: Leonel José Pérez Peña
A la memoria de mi padre Francisco Pérez Laguna, de quien bebà la pasión por la radio
Ahora mismo estoy en el edificio FOCSA, orgullo de la Arquitectura Civil Cubana, y como siempre contemplando a la Bella y Real Habana. Ahora la satisfacción es doble porque aquà radica “Radio Centro”; tres emisoras en el mismo sitial que seducen, persuaden y conquistan audiencias, con la sinceridad de su programación.
Desde muy niño, junto a mi papá escuchaba las transmisiones de la pelota a través de Radio Rebelde y me llama mucho la atención cuando Bobby Salamanca, cedÃa los micrófonos a sus colegas de la COCO-CMCK El Periódico del Aire, para que dijeran a toda Cuba como iba el juego en el Latino.
Aquel nombre primero, lo identificaba en mis años de infancia, con la abundante fruta de aquella sabana donde nacÃ, el coco, redondo y exquisito, luego, se me fue sedimentando en mi alma con una aspiración que se expresaba en forma suspiros; - “como me gustarÃa trabajar en la radio- “después comprendà que primero hay que ser un apasionado para luego ser radialista. Y eso aprendà con mi papá.
Él, como yo, descubrió la radio en la niñez, según me contó en uno de sus tantos testimonios que le grabe y que hoy, DÃa del Oyente y de la Familia Radialista, les presento:
Con mi padre aprendà que la radio te lleva a conocer otros lugares y a otras gentes; yo no me conformé con solo imaginarlo; rompà la estaca, brinqué la cerca y me fui a la ciudad a estudiar. Hay que tener cultura para poderla transmitir y, con la fiel compañÃa y los sabios consejos y apoyo del “viejo” me hice radialista y que honor, estar ahora aquà en el FOCSA, formando parte del colectivo de la COCO.
Como mismo escuché de niño y adolescente las aventuras “La flecha de Cobre” y “El Vengador” y otros espacios patrimonio cultural de la Radio Cubana, leà El Quijote, “La Divina Comedia” para lograr hacer realidad lo que mi padre decÃa.
La radio no ocupa espacio, no molesta, no interrumpe; es compañÃa sin invadir privacidad. Ese es el Don que tiene y que ningún medio lo puede lograr. Mi papá me lo decÃa con sus palabras sencillas, y por eso, siempre estuvo al lado de la radio hasta los últimos dÃas de su vida.
Felicidades familia apasionada por la radio. Yo soy uno más entre ustedes.
AMC