José Lezama Lima. Foto tomada del sitio web de la revista de literatura y arte Vuela Palabra. |
Por: Redacción Digital
La Habana, como una de las 15 provincias de Cuba, cuenta con historias, anécdotas, hechos y procesos que no se detienen, para demostrar su vitalidad.
En fecha como esta, pero en diversos años, en la Ciudad Maravilla tuvieron lugar distintos acontecimientos que marcan su devenir y que resultan de gran interés para los usuarios que visitan nuestro blog institucional.
Por ejemplo, en 1910, nace en la capital el novelista y poeta cubano José Lezama Lima. De estilo barroco, y considerado uno de los autores más importantes de la literatura hispanoamericana, influyó en una gran cantidad de escritores de su época y posteriores.
Según la enciclopedia EcuRed, junto a Alejo Carpentier, fue una de las más grandes figuras que ha dado la literatura insular. Su casa en la urbe es hoy la Casa Museo José Lezama Lima.
La propia fuente señala que su libro de poemas inicial fue Muerte de Narciso (1937) al que siguieron Enemigo rumor (1941), Aventuras sigilosas (1945), La fijeza (1949) y Dador (1960), entregas que son otros tantos hitos de la poesÃa continental en la lÃnea hermética y barroca de la expresión lÃrica.
Sin embargo, agrega, la obra que consagró a Lezama dentro de las letras hispanoamericanas fue la novela Paradiso (1966), en la que se ha querido ver una doble alusión a la inocencia bÃblica anterior al pecado original y a la culminación del ciclo dantesco.
Einstein durante su visita a La Habana en 1930. Foto tomada del sitio web de la emisora Habana Radio. |
Luego, en 1930, llega a La Habana el fÃsico alemán Albert Einstein, Premio Nobel de FÃsica (1921).
De acuerdo con un artÃculo publicado en el sitio web de la emisora Habana Radio, las primeras horas de ese viernes, luego de desembarcar del buque Belgenland en compañÃa de su esposa, el creador de la TeorÃa de la Relatividad pidió comprar un sombrero cubano, y de inmediato fue llevado a la tienda El Encanto, donde adquirió un jipijapa.
A las 11:00 a.m. fue recibido en la Academia de Ciencias Médicas, FÃsicas y Matemáticas de La Habana, sita en la calle Cuba, entre Amargura y Teniente Rey, donde fue objeto de un homenaje, al igual que en la Comunidad Hebrea.
Más tarde, el genio alemán participó en un almuerzo en el Hotel Plaza y después visitó la Escuela Técnica Industrial de Rancho Boyeros, el Hospital de Mazorra y los más selectos clubes y barrios capitalinos.
Pero en la mañana del sábado 20, el Premio Nobel de FÃsica, para sorpresa de todos, declinó todas las invitaciones oficiales y prefirió visitar los barrios más pobres y las tiendas más humildes de la ciudad.
Foto tomada del sitio web del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba. |
Por otra parte, en 1960, Fidel Castro Ruz, entonces primer ministro del Gobierno revolucionario, habla en la clausura de la Plenaria Nacional de los CÃrculos Sociales.
En las palabras iniciales de su intervención, el Comandante en Jefe expresó: "(...) No se ha venido aquà a librar una batalla como en dÃas anteriores frente a un grupito de contrarrevolucionarios, aunque cada acto de la clase obrera es una batalla que se le da a la contrarrevolución. En esta ocasión nos hemos reunido para llevar adelante una iniciativa más en favor de los trabajadores, una idea más de la Revolución, y que, sin duda, rendirá magnÃficos frutos".
También dijo que "revolución quiere decir cambios profundos y fundamentales en la sociedad, porque si no, no merecerÃa llamarse revolución ni podrÃa llamarse revolución, y el pueblo en revolución, el pueblo soberano, tiene atribuciones y tiene facultades, por cuanto del pueblo emanan todos los derechos, del pueblo emana el poder".
Fuentes consultadas: Enciclopedia cubana EcuRed y sitios web Fidel Soldado de las Ideas y Habana Radio
YER