Foto: Jit.
Por: Rodolfo Durán Almeida
En el Coloso del Cerro, los yayaberos decidieron tempranamente al fabricar siete carreras en los primeros cuatro capítulos ante las ofertas del abridor Pavel Hernández —perdedor— y el primer relevista Marcos Ortega.
Este dúo acepto siete limpias, toleró igual cantidad de indiscutibles, concedió cuatro boletos, propinó par de pelotazos y cometió un wild pitch en tres entradas de actuación.
Luego trabajaron los también derechos Jonathan Cruz, José Perera y el refuerzo Yenier Medina. Los dos primeros se fueron inmaculados del juego, pero el pinareño Medina no fue respaldado por el torpedero Yamil Rivalta, que como sustituto del titular Luis Vicente Mateo cometió dos marfiladas que propiciaron las tres últimas, todas sucias, para los espirituanos.
Por su lado, el abridor de los Gallos, José Isaías Grandales se despidió momentáneamente de la Liga Élite con una salida de calidad al trabajar seis capítulos de manera hermética.
El diestro, que partirá el jueves hacia Nicaragua con el equipo Cuba sub-23 años, colgó seis escones a los Leones, con apenas tres hits, seis ponches y solo dos boletos otorgados. Del tercio final se encargó el experimentado Yanieski Duardo, quien aceptó dos limpias en la séptima entrada.
Sencillo del jardinero Yosvani Peñalver —que regresó a la alineación— y biangulares de Walter Abreu y el refuerzo avileño Rubén Valdez las dos de los habaneros.
Pese al descalabro, la tropa de Guillermo Carmona lidera con cierta comodidad la II Liga Élite (8-4), con juego y medio de ventaja sobre sus verdugos espirituanos (6-5), y dos completos en relación con los Cazadores de Artemisa, que escalaron al tercer lugar (6-6).
Este dúo acepto siete limpias, toleró igual cantidad de indiscutibles, concedió cuatro boletos, propinó par de pelotazos y cometió un wild pitch en tres entradas de actuación.
Luego trabajaron los también derechos Jonathan Cruz, José Perera y el refuerzo Yenier Medina. Los dos primeros se fueron inmaculados del juego, pero el pinareño Medina no fue respaldado por el torpedero Yamil Rivalta, que como sustituto del titular Luis Vicente Mateo cometió dos marfiladas que propiciaron las tres últimas, todas sucias, para los espirituanos.
Por su lado, el abridor de los Gallos, José Isaías Grandales se despidió momentáneamente de la Liga Élite con una salida de calidad al trabajar seis capítulos de manera hermética.
El diestro, que partirá el jueves hacia Nicaragua con el equipo Cuba sub-23 años, colgó seis escones a los Leones, con apenas tres hits, seis ponches y solo dos boletos otorgados. Del tercio final se encargó el experimentado Yanieski Duardo, quien aceptó dos limpias en la séptima entrada.
Sencillo del jardinero Yosvani Peñalver —que regresó a la alineación— y biangulares de Walter Abreu y el refuerzo avileño Rubén Valdez las dos de los habaneros.
Pese al descalabro, la tropa de Guillermo Carmona lidera con cierta comodidad la II Liga Élite (8-4), con juego y medio de ventaja sobre sus verdugos espirituanos (6-5), y dos completos en relación con los Cazadores de Artemisa, que escalaron al tercer lugar (6-6).
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