Diseño: Alejandro Castro/Radio COCO |
Por: Abel Rosales Ginarte
La elegancia de la voz de Manolo Ortega, su timbre poderoso y su gran versatilidad lo convirtió en uno de los locutores cubanos más queridos. Su incursión en la narración deportiva es poco conocida.
El propio Ortega recordó su paso por tan respetada profesión junto a Ibrahim Urbino. Narraron algunos juegos de béisbol y por su labor obtuvo la distinción "novato del año" que otorgaba el Periódico Hoy en los años 40 del siglo pasado en La Habana.
Coincidiendo con la etapa del gran periodista Guido GarcÃa Inclán, en 1948, coincidiendo con la etapa del gran periodista Guido GarcÃa Inclán, Manolo Ortega comenzó a trabajar en Radio COCO. Su paso por el programa de sátira "Cuba en llamas" es recordado con cariño. Manolo se exigió mucho profesionalmente, lo que es esencial para el crecimiento de un artista.
El camino del gran locutor cubano siguió a toda velocidad. La elegancia de Ortega no era solo de su voz. Su impresionante atractivo lo condujo hasta la inauguración experimental del Canal 6 de CMQ Televisión en 1950. Meses después es locutor exclusivo del Noticiero CMQ. El camino hacia la excelencia ha comenzado.
Manolo se convirtió en maestro de generaciones de locutores cubanos. Ismael Rensoly, Premio Nacional de Radio, autor del conocido eslogan "Radio cubana, sonido para ver", recuerda la impresionante capacidad de Ortega cuando le grabó la hermosa frase que es sÃmbolo del medio radial en el paÃs.
Escucharlo frente a los micrófonos regalando su arte o conversando con los amigos y admiradores era un privilegio. Manolo fue un cubano con el arte de la palabra en sus venas, uno de los grandes que marcó una etapa en nuestra querida CMCK Radio COCO, el periódico del aire.
AMC