Foto: Ricardo Gómez.
Por: Abel Rosales Ginarte
El emblemático Teatro MartÃ, en la parte más antigua de La Habana, abrió sus puertas al Ballet Nacional de Cuba (BNC) en una noche memorable.
El cuerpo de baile de la insigne compañÃa y sus más importantes estrellas entregaron su arte en homenaje a los 503 años de la otrora Villa de San Cristóbal.
Un programa especial lleno de emociones demostró la vitalidad de los integrantes de la compañÃa más importante de la Isla fundada por Alberto, Fernando y Alicia Alonso.
El virtuosismo de la violinista Lissy Abreu y del pianista Marcos Madrigal, en la interpretación de la música de Camille Saint Saens, en La muerte del cisne, que asumió la primera bailarina y directora del BNC, Viengsay Valdés, marcó la apertura.
El cierre con el clásico Giselle deleitó a los asistentes. El cuerpo de baile de la compañÃa cubana demostró su autenticidad y Annet Delgado y Dany Hernández, primeras figuras, levantaron ovaciones entre el público asistente.
El colofón de la jornada fue la entrega de la Giraldilla de La Habana, máximo reconocimiento del Gobierno de la capital cubana a Valdés, continuadora del legado de Alberto, Fernando y Alicia Alonso.
El vicepresidente de la República de Cuba, Salvador Valdés Mesa; el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo Hernández; y Alpidio Alonso Grau, ministro de Cultura, entre otros dirigentes del Partido Comunista de Cuba y el Gobierno de la ciudad asistieron al homenaje.
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