Don Fernando Ortiz es considerado el tercer descubridor de Cuba por su obra investigativa acerca de los procesos de transculturación que definieron la identidad nacional
Por: Sender Escobar
La erudición era una de las cualidades de un polímata llamado Fernando Ortiz. Desde la investigación de los componentes históricos, religiosos y sociales, Don Fernando mostró a los ojos del mundo y Cuba la riqueza intrínseca de un país formado por múltiples influencias.
En lo marginal y segregado: la población negra, fue donde mayor énfasis puso a sus investigaciones. Libros y conferencias con la cultura negra de protagonista, fueron parte de su obra y actitud antirracista, para revalorizar la influencia e identidad aportada a la nación por los hijos de África traídos como esclavos a Cuba.
Doctorado en España como abogado y especializado en criminología en Italia su formación académica volcada hacia el derecho, no fue limitante en todos los perfiles de la cultura que decidió buscar los entresijos. Incluso las ciencias no escapaban al racismo anclado en la sociedad cubana y en lo que parecía ser un tabú o simplemente ignorado dedicó su trabajo investigativo.
Presidente en diversas instituciones como la Sociedad Económica de Amigos del País o la Academia de la Historia de Cuba; director de varias revistas científicas; miembro de diferentes sociedades académicas en el continente y dueño de un bufete donde trabajaron jóvenes como Pablo de la Torriente y Rubén Martínez Villena. La defensa de la cultura cubana y la libertad como elección fueron parte de su obra profesional y política.
Su integración al Grupo Minorista, así como sus críticas a la dictadura de Machado testimonian que no solo el estudio del pasado y la importancia de un presente libre, desde lo político y social, fueron para Don Fernando una manera más de afianzar la identidad cubana y luchar desde lo académico contra prejuicios y estigmas.
Don Fernando parecía tener la virtud de ser inagotable, para debelar misterios ocultos en la historia cubana y el proceso de transculturación. Concepto defendido en su obra desde múltiples enfoques.
Pero también lo que era Cuba antes de la colonización española, fue una de las investigaciones más profundas que emprendió desde la arqueología y la literatura especializada.
Para traer a la contemporaneidad la vida de los aborígenes, divulgó costumbres y rituales originarios, cuando apenas palabras sueltas del arahuaco incorporadas al hablar de los cubanos, eran lo único trascendente y conocido de quienes sufrieron la esclavitud y casi la extinción total en nombre de una religión ajena amparada en la conquista.
Nacido el 16 de julio de 1881 y su obra fue, igualmente el 16 de julio pero de 2019, declarada Patrimonio Cultural de la Nación. Catalogado como el tercer descubridor de Cuba, desde su juventud emprendió el entonces incierto camino de la investigación para develar mediante la etnografía y el folkclor, los orígenes nebulosos que componían la mística religiosa, musical y social de los aborígenes y afrocubanos. Fernando Ortiz construyó lápiz en mano, el abanico espiritual de un archipiélago.