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| El Día Mundial de la Salud Bucal se conmemora cada 20 de marzo. Foto: Tomada de Internet. |
Por: Ania González Rodríguez
La salud bucal se mide y se compara principalmente por un índice adoptado internacionalmente, conocido como CPOD, relativo a caries, pérdidas y obturaciones dentales.
En este campo Cuba exhibe indicadores similares a países desarrollados teniendo en cuenta que el 74 por ciento de los niños de cinco y seis años tienen todos sus dientes sanos; el índice de cariados, perdidos y obturados a los 12 años es 1,29.
Otro hecho es que, a la edad de 18 años, el 92 por ciento de la población conserva todos sus dientes en boca y el porcentaje de población sin afectación gingival y periodontal es el 71,2.
Por otra parte, en materia de capital humano la Estomatología cubana cuenta con 19 mil 240 estomatólogos y 11 mil 723 licenciados y técnicos en atención estomatológica y prótesis.
Además, para la formación de dichos profesionales existen en la mayor de las Antillas 15 universidades de Ciencias Médicas y una Filial Universitaria del municipio especial Isla de la Juventud.
Ahora bien, la pandemia sin dudas ha afectado los sevicios estomatológicos en la Isla, los que han tenido que concentrarse solo en las urgencias durante la fase de transmisión autóctona limitada por el peligro que entraña para el contagio del que brinda el servicio, la cercanía con que atiende al paciente.
Podemos acudir ahora a los servicios de urgencias si presentamos, por ejemplo: fracturas dentarias, dolor, sangrado, inflamación, encías dañadas, prótesis fracturadas, lesiones que no sanan o traumas maxilofaciales.
No obstante, es loable el trabajo que por estos días realiza el personal de la Estomatología cubana, porque, de manera general, no ha parado de trabajar en medio del azote de la Covid-19, pues los que no han estado atendiendo las mencionadas urgencias se han volcado en las comunidades, en función de la actual batalla epidemiológica, en acciones que también entrañan cierto riesgo.
Somos testigos como muchos han sido incluso beneficiarios, del trabajo de los odontólogos (profesionales o técnicos) en el apoyo a los centros de aislamiento de Covid-19, haciendo pesquisa junto a los estudiantes de ciencias médicas o tomando muestras de PCR en los lugares donde se ha hecho necesario, entre otras labores, donde no ha faltado su positiva respuesta y sentido del deber.