Niños de Acualina, un proyecto comunitario de educación ambiental, perteneciente a la escuela primaria Eliseo Reyes del municipio habanero de Playa. Foto: Modesto Gutiérrez Cabo/ACN |
Autora: Elena Iglesias Cuesta
El proyecto Acualina, dirigido a la educación ambiental de los niños de la enseñanza primaria, acaparó la atención de los participantes en la XI Convención Internacional sobre Medio Ambiente y Desarrollo, que sesionó recientemente en el Palacio de Convenciones de La Habana.
El proyecto Acualina, dirigido a la educación ambiental de los niños de la enseñanza primaria, acaparó la atención de los participantes en la XI Convención Internacional sobre Medio Ambiente y Desarrollo, que sesionó recientemente en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Su promotora, Ángela Corvea, conocida popularmente como Acualina, dijo sentirse orgullosa de que su proyecto fuera escogido para inaugurar el evento científico, ya que representó un alto reto.
Lo más llamativo en la presentación, destacó, fue la aparición por una de las esquinas del escenario de una figura diminuta, una pequeña niña de tres años, quien declamó la poesía Al planeta salvaremos.
Isa, como ella misma se presentó, se mostró dispuesta desde el inicio a decir la poesía, lo cual hizo de un modo fluido y coherente, poniendo su empeño y entonación para hacer llegar el mensaje.
De igual forma, Corvea expresó: “Asumimos el reto de inaugurar la convención; fue un trabajo arduo, porque Acualina es un proyecto comunitario, sencillo, el cual hace muchas presentaciones, pero no de esta magnitud; pero estoy muy feliz porque todo terminó muy bien y los niños pudieron expresar ante más de 600 invitados, su amor y respeto hacia el medio ambiente.
Infantes de diferentes edades integran el proyecto, surgido hace 14 años en la escuela primaria Eliseo Reyes, de la localidad habanera del Náutico, situada en el municipio de Playa, y durante este tiempo ha sido dirigido por la licenciada en Biología Marina.
“Acualina es como un cardumen de peces, una hormiguita siempre haciendo algo: limpieza de costas, márgenes de ríos, igualmente participa en intercambio con otras escuelas y en círculos de interés, porque su misión principal es promover la educación ambiental en las generaciones más jóvenes y desarrollar la cultura de una relación amigable y sostenible con el medio ambiente.
“La familia también participa y son muchos ya los que se han sumado, creo que se avanza, y son muchas las Acualinas que han pasado por aquí.
“Cuidar el medio ambiente, nuestro planeta que es la única casa que tenemos es algo sano, altruista, gratificante, por lo tanto, cualquier acción que se asuma en este sentido, siempre será bueno y beneficioso para los más pequeños del hogar”.
Unidos e integrados por un desarrollo próspero y sostenible fue el lema de la cita que reunió en la capital cubana a más de 600 participantes de unos 30 países.
Ángela Corvea. Foto: Elena Iglesias
La pequeña Isabel junto a su mamá (derecha) y otra integrante del
proyecto Acualina. Foto: Elena Iglesias