Medallas ganadas con el corazón

El licenciado Leonel Cano Pérez, metodólogo de la educación especial.
Foto: Teresa Valenzuela

Autora: Teresa Valenzuela

Una vez más los muchachos triunfaron. Esta vez fue en la III Copa América de Fútbol de Olimpiadas Especiales de Inclusión, Equipo Unificado, Uruguay 2016, en la que Cuba participó como invitada.

El licenciado Leonel Cano Pérez, metodólogo de la educación especial en el Ministerio de Educación que atiende las olimpiadas especiales, señaló que están muy contentos por los resultados; se trata de atletas de este tipo de competencia que padecen de algún tipo de discapacidad intelectual, así como otros convencionales de la secundaria básica y el preuniversitario.

Indicó que la actuación de la mayor de las Antillas fue calificada de excelente. “Así lo reconocieron porque cumplimos con la filosofía que caracteriza estos eventos, es decir, se vio la amistad, el cariño, las relaciones entre los participantes, la higiene, la cultura, la educación, o sea, todos los parámetros que pide Olimpiadas Especiales, y una vez más estuvimos entre los primeros países, de los 12 que participaron esta vez”.

Cano Pérez dijo que el equipo estuvo compuesto por 15 atletas, todos del municipio Manatí, provincia de Las Tunas. “Les enviamos una felicitación  a todos los que colaboraron para el éxito de esta actividad”.

Como aspecto a destacar mencionó que ganaron en la inclusión social, específicamente en la compenetración entre ellos, que les brindó más seguridad a estas personas con discapacidad mental, con mayor énfasis  en edades tempranas. “Este es el mayor logro que alcanzamos”.

Al preguntarle sobre cómo el programa de Olimpiadas Especiales Cuba trabaja en preparación de atletas jóvenes, Cano Pérez respondió: “Comenzamos  a inicios del 2016 por La Habana con resultados positivos en los círculos infantiles especiales Zunzún y Ernestito, a los que asisten niños con discapacidad intelectual y también en la escuela especial Sierra Maestra.

“Este es un proyecto que extenderemos paulatinamente al resto del país por los beneficios que brinda, movimiento que asimismo moviliza a decenas de participantes”.

Se trata -explicó-, de un medio que facilita a las personas la oportunidad de elevar la autoestima, fortalecer el carácter, desarrollar habilidades físicas, demostrar el talento y llevar a la práctica su potencial humano.

Añadió que del mismo modo les brinda la oportunidad para desarrollar la aptitud física, demostrar valor y coraje, experimentando y compartiendo alegrías y destrezas con otros atletas, familia, escuela y comunidades donde residen. Se trata de una obra que encierra gran humanidad en la que todos salen vencedores -acotó-.